Advertencia: NADA DE LO QUE DIGA AQUÍ PODRÁ SER USADO EN MI CONTRA.



miércoles, 10 de diciembre de 2014

vos, cuál sos?

Es noche de viernes,  él tiene una camisa nueva que le queda impresionante porque se mató en el gimnasio casi todos los días, justo cobró y tiene muchas ganas de joda. Además, hoy inauguran un nuevo boliche y sabe que va a ir gente muy interesante, y quiere bailarse todo. Es una noche muy prometedora. Elige las zapatillas mas cancheras, el pelo un poco desordenado a propósito y unos boxers nuevos y sexies por si se da la ocasión. Con dos o tres whatsapps se produce una reacción en cadena que conduce a una enorme noche llena de amigos. Está listo para conocer a Don Perfecto. Ese que tiene una sonrisa perfecta, el pelo perfectamente arreglado y una mirada directa. Llega tarde a la fiesta y solo.  Se siente atractivo y sonríe a todo el mundo.  Todos están hablando de su look, de lo lindo que está. De día puede ser lo que quiera. Puede ser el cajero del súper que nunca tiene cambio, puede ser el colectivero que maneja muy mal, puede ser el estudiante que no se saca buenas notas en la facultad, puede ser el ingeniero que toma malas decisiones, puede ser el músico que no tiene mucho éxito, puede ser el profesor que es odiado por sus alumnos .... pero por las noches puede convertirse  en el enigma que todos quieren resolver desesperadamente. Es lo que todos están deseando... incluso lo que ÉL desea....

Y vos? vos si querés podes ser el borracho que baila cerca de la barra intentando ahogar sus penas en una felicidad fingida, esperando que algún pibe que te lleve a casa y se quede con vos, aunque sea solamente por pena...


it's like I got this music in my mind saying it's gonna be alright


jueves, 10 de julio de 2014

nunca había sido el pasajero...

No podía dejar de controlar todo, no podía dejar que las cosas sucedan y no saber... un día a la vez era todo lo que necesitaba.
Hubo un tiempo sin confianza, hubo un tiempo sin amor... pero me acabás de mostrar que puedo entregarte mis llaves...
Así que vamos a dar una vuelta y perdernos, vamos a tomar una oportunidad para encontrarnos. Realmente quiero ver el mundo con vos, cada paso se siente increíblemente nuevo. 
Es difícil saltar sin red, pero acabo de saltar y no tengo ningún remordimiento. Sabés por qué? porque vos sos mi copiloto, ahora puedo disfrutar el viaje.
Voy a dejar que agarrés el camino que quieras, porque quiero que vos tomés el volante. Realmente nunca había sido el pasajero, nunca supe lo bien que se podía sentir.... 
El camino girará y se pondrá sinuoso, pero sé que estoy en buenas manos... Nunca había sido el pasajero, pero tengo fe que vamos a ver más sin un mapa....

Y ahora finalmente nos estamos enamorando... agito mis manos en el aire mientras vos conducís....

Definitivamente,

Esto es vivir
Esto es vivir
Esto es vivir




miércoles, 2 de julio de 2014

el dolor demanda ser sentido.

No puedo hablar de nuestra historia de amor, así que hablaré de matemáticas. No soy matemática, pero de algo estoy segura: entre el 0 y el 1 hay infinitos números. Están el 0,1, el 0,12, el 0,112 y toda una infinita colección de otros números. Por supuesto, entre el 0 y el 2 también hay una serie de números infinita, pero mayor, y entre el 0 y un millón. Hay infinitos más grandes que otros. Nos lo enseñó un escritor que nos gustaba. En estos días, a menudo siento que me fastidia que mi serie infinita sea tan breve. Quiero más números de los que seguramente obtendré, y quiero más números para Augustus de los que obtuvo. Pero, Gus, amor mío, no puedo expresar lo mucho que te agradezco nuestro pequeño infinito. No lo cambiaría por el mundo entero. Me has dado una eternidad en esos días contados, y te doy las gracias. 


jueves, 26 de junio de 2014

TESTIMONIO

Sí, yo vi todo. 
Desde el comienzo, cuando ellos llegaron, justo me estaban trayendo el café con leche y las medialunas.
Al principio sentí nervios porque se sentaron muy cerca mío- mesa de por medio- así que traté de ocupar mi atención en el diario, de título en título.
Pero cuando los volvía a mirar, sentía algo muy llamativo y hasta perturbador... eran como siameses de mirada. Ella sólo estaba donde estaban los ojos de él y él sólo estaba donde estaban los ojos de ella. Y yo, ahí a pocos metros, pude haber sido un elefante y nunca, pero nunca,  lo habrían notado.
Lo recuerdo patente, una cosa así no se olvida nunca... fue a ella a quien vi hablar todo el tiempo. Con las manos en las piernas apretujando el mantel, habló sin pausas durante un rato. Sinceramente, no podía escuchar de que hablaban, pero de a poco, a él le fue cambiando la expresión en su rostro. Todos los músculos de su cara parecían haberse puesto de acuerdo para ir mostrándome, de a finas capas, el camino hacia una tristeza importante, de esas de las que uno no sabe si va a volver, de esas que te agarran desprevenido y te dejan tu existencia al revés.
Ella hablaba y algo viajaba desde su boca hacia él. Y yo, sin escuchar, veía cómo se le estrellaban las palabras en la cara al pobre, y me hacía acordar en King Kong cuando queda atrapado en la punta del edificio, y las balas de los aviones se le meten por todos lados.
La angustia se sentía llegar en oleadas, y se esparcía como una masa densa, imparable.
Un viejo en una mesa alejada soltó un suspiro de búfalo. "Querido, traéme la cuenta, se bueno.", dijo, y las palabras sonaron como el ruido de un motor viejo, el logró escapar primero.
En los televisores , la imagen estaba rara y las luces de todo el salón se entrecortaban.
A mi me empezó a doler la cabeza, y por alguna razón, el café con leche perdió su sabor y comenzó a tener feo gusto.
Ella seguía hablando y él escuchaba mientras se agarraba de la silla con tanta fuerza, que yo lograba ver cómo se le hinchaban las venas de la mano. Hasta que de repente, ella se detuvo, dejó plata en la mesa y se fue dejándole una mirada compasiva ya desde la vereda. Y fue en ese momento que comenzó el caos.
El hombre, petrificado en su silla, comenzó a temblar de una forma que no tardó en hacer temblar todo el bar. Las paredes empezaron a resquebrajarse; los ventiladores de techo se aflojaban y se caían como se caen las moras; las luces explotaron y también cayeron; las mesas y las sillas se movían como si tendrían vida propia; los vidrios y los espejos explotaron en millones de pedazos... .
Miren,yo logré salir porque estaba cerca de la puerta y luego ya no supe qué pasó ahí dentro, no quise mirar para atrás, no tuve el valor... Pero si ustedes quieren publicar este testimonio, digan la verdad.
Yo estuve ahí. Yo lo vi todo.
Lo que escucharon los vecinos no fue la explosión de las garrafas de la cocina, como se está diciendo en los medios.
Lo que se escuchó , en realidad, fue un corazón romperse.






lunes, 12 de mayo de 2014

martes, 1 de abril de 2014

scar tissues


—¿Y esas cicatrices?

—Son cicatrices de batalla.

—¿Ah, sí? ¿Contra quién luchaste?

—Contra mí mismo y sabés que?... GANÉ.



Verdades

Hace un tiempo empecé a pensar que a veces las Verdades no son esas cosas sagradas que yo pensaba que eran.
Creo que hay veces que las Verdades se presentan por la mañana, cuando menos las esperas,  mientras uno está en la cama haciendo fiaca, por ejemplo. Una Verdad desaliñada y enorme. Esas que se te sientan en la nuca con su culo inmenso mientras uno está desprevenido todavía con los ojos cerrados y tratando de comenzar el día… Y agarrate, Catalina…
Yo qué sé. Luego de haber jugado a la cacería de Verdades en juntadas con amigos, donde todos nos tiramos con filosofías, teorías, historias, anécdotas, reflexiones, y bla bla bla; luego de haber intentado hacer de la meditación un hábito, luego de buscar las Verdades en muchas personas y lugares…. yo sigo prefiriendo a la gorda culona que viene y se me sienta en la nuca.
Y qué mejor escenario que cuando está uno absolutamente sólo en la cama. Uff, gran escenario de epifanías, si los hay! Sin inciensos ni música zen. Así –de repente y sin piedad - es como les gusta aparecer a estas Verdades pomposas.
Porque saben que somos lo que somos cuando estamos solos. Y es ahí, cuando uno está totalmente sólo, que aparece la culona para cachetearte cuando menos te lo esperas. Porque a ellas les gusta eso. No aparecen en las juntadas con vinitos ricos, ni en las meditaciones ni en las reflexiones...
Aparecen como hoy, en mi cama, y lo dejan a uno hecho una persona un poquito mejor.

viernes, 28 de febrero de 2014

a vos?

No podés elegir si te van a hacer daño en este mundo, pero sí elegís quién te lo hace...




Me gustan mis elecciones...

construir.

Me preocupa la gente que dice que anda buscando el amor, como si el amor ya estuviera por ahí listo y terminado. Como si existiera un amor enlatado, un producto diseñado que eliges en algún escaparate. Se han creído el cuento del amor prefabricado que nos venden en las películas de domingo en la noche o que nos cantan en la radio. Uno no busca el amor, uno lo construye.